Dead poets society (1989): poesía que cambia la vida

Dead poets Society (La sociedad de los poetas muertos, o El club de los poetas muertos), es una película de Peter Weir, ganadora del Premio Óscar a Mejor guión original en 1990. Imágenes memorables, poesía norteamericana, y la actuación de un enérgico Robin Williams es lo que veremos en esta cinta.

Dead poets society: la libertad a través de la poesía

El profesor y ex alumno, John Keating (Robin Williams), llega para dictar la clase de Lengua a un grupo de estudiantes del colegio Welton en Nueva Inglaterra (norte de USA), donde se aplica una disciplina férrea que obliga a los alumnos a alinearse al pensamiento de las autoridades sin cuestionar nada.

Desde la primera clase, el nuevo profesor marcará la diferencia con unos métodos nunca antes vistos en la escuela, utilizará la poesía para enseñarles a sus alumnos un camino hacia su propia libertad, y sobre todo, tratará de hacerlos pensar por su propia cuenta, para que hagan de su vida algo que valga la pena.

Inspirados por Keating, los alumnos iniciarán un club secreto llamado La sociedad de los poetas muertos donde se reunirán para leer poesía y embarcarse en nuevas aventuras que cambiarán sus vidas con consecuencias inesperadas.

Una historia concentrada en la accíón

Dead poets society es una cinta que retrata la adolescencia, quizá la etapa más idealizada de la vida; y la dirección de Peter Weir no pasa esto por alto. El film se desarrolla a través de una narrativa con muchas omisiones, que presenta brevemente a los personajes, básicamente como estereotipos, para darle prioridad a la acción. De manera que quedamos enganchados por un carismático y contenido Robin Williams, y por los sueños y dificultades por las que transcurren las historias de los estudiantes.

La cámara de Peter Weir nos hace cómplices de las aventuras de los chicos, se involucra en los momentos que comparten con el profesor como un integrante más.

Y también retrata sutilmente la psicología de los personajes individualmente, como cuando acompaña a Todd Anderson y gira alrededor de él, mostrándonos y participando de su epifanía, en una de las escenas más recordadas del film.

La cámara como metáfora del crecimiento

Además, la cámara de Peter Weir, a lo largo de todo la película, desarrolla una metáfora que enriquece poderosamente nuestra visión del crecimiento de los personajes.

Al inicio vemos a los alumnos en un plano picado, la cámara se ubica por encima de ellos —como si estuvieran siendo constantemente vigilados—, pero esta posición irá cambiando mientras se desarrolla la historia. Pasando a estar a la altura de los chicos mientras somos testigos de sus aventuras y nos hacemos cómplices de ellos. Y cerca al final se ubica por debajo de ellos, en una toma en contrapicado, que pone de manifiesto la transición de estos jóvenes y su crecimiento.

Sin duda es una película llena de sentimentalismos, pero dirigida con mucha sobriedad y con un guión que no tiene pierde; en gran parte es gracias a este guión que las actuaciones de Ethan Hawke, Robert Sean Leonard y Robin Williams llegan a ser a tan potentes.

Curiosidades de Dead poets society

En anuario del profesor Keating que los alumnos descubren en la película, es el verdadero anuario de Robin Wiliams de su época adolescente, en el instituto Redwood en California.

La historia está basada en la experiencia del guionista Tom Schulman en la academia Montgomery Bell, una escuela preparatoria en Nashville, por ello, hasta mucho tiempo después de estrenada la película, sus ex compañeros lo llamaban para preguntar si eran algún personaje.

Ficha técnica de la película

La sociedad de los poetas muertos (Dead Poets Society), 1989.
Dirección: Peter Weir. / Producción: Steven Haft, Paul Junger Witt y Tony Thomas. / Guión: Tom Schulman. / Música: Maurice Jarre. / Fotografía: John Seale. / Protagonistas: Robin Williams, Ethan Hawke, Robert Sean Leonard, Josh Charles, Gale Hansen, Norman Lloyd.

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